Ebenezer Scrooge nació un 14 de Marzo
de 1803 en Augsburgo, una ciudad perteneciente a Alemania. En esta localidad
vivió durante toda su vida y era el lugar donde residían la mayoría de los
miembros de su familia excepto su hermano mayor, Pablo, que vivía en el otro
extremo de Alemania. Éste solo tenía 22 años y se había asentado allí con su
novia Berta que dentro de tres escasos meses se casaban. Los jóvenes se
encontraban en el aquel lugar por motivos de trabajo. Ebenezer tenía otro hermano
dos años mayor que él con el que durante su infancia tuvo muy buenas relaciones. Los padres de Scrooge, Bernard y Adelina, tenían ambos
un puesto de trabajo fijo, el padre como banquero en un banco que era propiedad suya, y la madre como costurera en
un famoso taller de confesión. La familia de Ebenezer Scrooge disfrutaba de una buena
situación económica y, debido a esto, los padres pudieron ofrecer a su hijo todo lo que necesitó o le hizo falta. Por
este motivo el pequeño pasó una infancia que muchas personas deseaban tener pero
muy pocas gozaban de tener dicho prodigio. La familia vivía en una gran casa en el
centro de Augsburgo que poseía las mejores instalaciones de aquel lugar.
Con tres años, Scrooge entró en el
colegio infantil más cercano a su casa donde estuvo matriculado hasta que
cumplió los cinco años. En este periodo de tiempo fue conociendo a niños y niñas
como él con los que mantuvo buenas relaciones de amistad. Una vez terminó de cursar
educación infantil entró en primaria. Scrooge era un chico inteligente y listo,
por lo que no tuvo problema alguno para llevar sus estudios adelante. Una vez ingresó en el centro de educación secundaria fue bajando sus notas por el alto nivel de dificultad
que tenían estos estudios, pero, a pesar de esto, Scrooge terminó secundaria sin
problema alguno. Ebenezer era un joven egoísta, tacaño, algo testarudo y poco amigable, ya que no le gustaba hablar con la gente ni salir a la calle a pasear o a tomar el aire. Scrooge, por su comportamiento, apenas tenía amigos. Solo se llevaba verdaderamente bien con un joven que estaba en su clase llamado Richard. Ambos se veían en el colegio, porque a ninguno le gustaba salir, o en casa de uno de ellos, donde quedaban para realizar trabajos relacionados con sus estudios o para jugar juntos a algún juego.
Cuando Scrooge se hizo mayor de edad comenzó la licenciatura de derecho. Durante los cinco años que ésta duró el joven pasó sus días estudiando sin parar. En este periodo de tiempo falleció su abuela materna que era un gran apoyo para él. Esto provocó que Scrooge se entristeciera e incluso se propusiera abandonar sus estudios, cosa que no hizo porque su familia le convenció y animó para seguir adelante. Al terminar dicha carrera, con muy buenas notas, Ebenezer no tuvo que buscar trabajo porque al ser su padre dueño de un banco, comenzó a trabajar en dicho lugar. El puesto que ocupaba era director de asesoría jurídica.
Scrooge era un hombre de corazón duro, avaro, egoísta, como bien se nombró antes, y al que le disgustaba la Navidad, los niños o cualquier cosa que produzca felicidad. Odiaba salir a la calle, que las personas le saludaran y, sobretodo, que en Navidad, época que tanto odia, le digan, por ejemplo: ¡Feliz Navidad! o ¡Qué Dios le bendiga! No le importaban los demás, pero sí los negocios y ganar dinero. Su mejor amigo y socio se llamaba Jacob Marley y su única afición era cuidar de los pájaros que tenía en su extenso jardín, darles de comer y beber y mantenerlos limpios.
Cuando Ebenezer tenía aproximadamente 47 años, una noche cercana al día de Navidad, recibió la visita de un fantasma que resultaba ser el de su mejor amigo y socio Jacob Marley que había muerto hace 7 años. Éste le dijo que, por haber sido un hombre avaro, su muerte se acercaba y tendría que llevar consigo una gran cadena por la maldad que había tenido durante toda su vida. También le anunció la venida de tres espíritus que fueron la única oportunidad que tuvo para salvarse. Esa misma noche, justo cuando dio el reloj la 1 de la madrugada, apareció en la habitación de Scrooge el fantasma de las Navidades Pasadas, que lo llevó atrás en el tiempo y le mostró una serie de hechos que le ocurrieron a Ebenezer. La siguiente noche a la misma hora vuelve a aparecer otro fantasma, pero esta vez el de las Navidades Presentes, que le hace ver la situación que tenía la familia de su empleado Bob. También le muestra como todos celebran alegremente la navidad, incluido su sobrino Fred. Finalmente este fantasma envejece y muere rápidamente. El tercer y último fantasma, el Fantasma de las Navidades Futuras, le muestra su misma tumba. Scrooge se horroriza y le dice al fantasma que va a cambiar. Al final, Ebenezer se convierte en un ser generoso y amable.
Scrooge se casó a los 51 años con una mujer española llamada Lucía que estaba viviendo en el mismo lugar que él. Ambos no tuvieron hijos porque eran mayores. Ebenezer Scrooge murió el 6 de Diciembre de 1882 a la edad de 79 años.
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