domingo, 1 de junio de 2014

Biografía de Ahab

    Ahab Sliven Winbed nació el 13 de diciembre de 1653 en Nantucket. Se crió en el ceno de una familia pobre que vivía gracias a la pesca de ballenas y cachalotes.

    De pequeño nunca se interesó por el negocio familiar. Él quería irse a la ciudad y estudiar, llegar a ser alguien de prestigio pero muy a su pesar tubo que heredar el trabajo que durante generaciones había pertenecido a su familia.

    Con tan solo 14 años recién cumplidos se embarcó en un gran barco junto con su padre y algunos familiares más, dejando a sus dos hermanas y a su madrastra en tierra firme.

    En el primer mes divisaron 7 ballenas de las cuales 2 estaban muertas a la deriva, esperando a que los peces y los pájaros se comieran sus nauseabundos cuerpos.

    A su cuarto cachalote se descuidó y al tirar el arpón contra aquella bestia se le enganchó la cuerda en el brazo y casi lo pierde.

    Durante años estuvieron en la mar y cuando regresaron el pequeño Ahab ya no era tan pequeño.

    Cuando alcanzó sus 45 años lo nombraron capitán del Pequod, una nave ballenera al igual que otras tantas.

    Tras muchos años al frente del Pequod se topó con una ballena. Ésta era la más grande que jamás había visto y tenía una piel blanca como el marfil. La monstruosa criatura chocó contra el barco y el capitán fue tras ella. Moby Dick, que así se llamaba, le arrancó la pierna a Ahab. 

    Desde entonces el capitán no dormía, no comía, apenas hablaba. Solo quería encontrar a esa ballena y matarla costase lo que costase.

    Pasaron los años y no divisaron a la ballena hasta que un buen día dieron con ella. Estaban exactamente en el sitio donde aquella monstruosidad le había arrancado su pierna años atrás.

    En el primer día solo consiguieron clavarle unos arpones. Al segundo, por desgracia Moby Dick se llevó consigo a las profundidades a uno de sus hombres más fieles. Y al fin al tercer día tubo un encuentro cara a cara con la ballena. Todo ocurrió muy rápido. El capitán le clavó el arpón en uno de sus costados y la cuerda que éste llevaba atada se enredó en el cuello del capitán.

De repente desapareció, su ansia de venganza se cobro su vida. En cuestión de segundos el capitán yacía junto a su odiosa ballena en las profundidades de aquel mar tranquilo.


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